El frizz es uno de los problemas más comunes para quienes tienen cabello rizado, ondulado o simplemente difícil de manejar. Pero a menudo no son sólo la humedad o el clima los culpables: hay hábitos cotidianos que pueden empeorar la situación. Descubramos juntos cuáles son los errores más comunes y cómo evitarlos para mantener tu cabello sano y definido.

1. ¡No cepille ni toque!

El primer consejo para combatir el frizz es: olvídate del cepillo (a menos que tu cabello esté completamente mojado) . Pasar un cepillo o los dedos por el cabello rizado lo separa y lo convierte en un desastre encrespado. Deja que tus rizos se mantengan naturales y tócalos lo menos posible.

2. Errores en la ducha

Evite situarse directamente debajo del chorro de agua caliente, especialmente en invierno. El agua muy caliente puede resecar el cabello y aumentar el frizz. Además, evita frotar tu cabello con la toalla, sécalo suavemente y ten cuidado de respetar la estructura de tus ondas y rizos para no "desenredarlos".

3. Falta de hidratación

Asegúrate de seguir una rutina de hidratación adecuada: utiliza siempre acondicionadores extra hidratantes y disfruta regularmente de mascarillas nutritivas . Cuanto más rizado sea el cabello, más frecuentes serán necesarios estos tratamientos. Por ejemplo: el cabello rizado requiere mascarillas y paquetes aproximadamente una vez a la semana, mientras que el cabello ondulado puede limitarse a una vez cada dos semanas.
Aplique el acondicionador sobre el cabello mojado, agregando agua a medida que lo aplica, y déjelo actuar durante al menos 5 minutos (o durante el tiempo recomendado en el producto). Peina tu cabello con los dedos bien cerrados o utiliza un cepillo desenredante diseñado específicamente para rizos, que tenga dientes anchos que eviten que se rompa.
Esta técnica de aplicación permite que el agua penetre más profundamente en el tallo del cabello, mejorando la hidratación y garantizando un aspecto final más definido y sin frizz.

4. Productos y técnicas de peinado incorrectos

Si tu cabello se ve fino y desordenado cuando está mojado, se verá encrespado cuando esté seco. Antes de secar: ¡parar! Añade más agua para transformar tus rizos/ondas en mechones definidos, usando la crema para peinar Leonia . Es importante utilizar un producto que tenga una buena fijación. Así que arruga, define y peina tu cabello, experimentando con la técnica de peinado que mejor se adapte a tu cabello. Luego seca con el difusor cerca, inclinando la cabeza en diferentes posiciones pero sin tocar el cabello, para crear un efecto definido, natural y sin frizz.

5. Toca antes de que se seque

Recuerde que el cabello es más vulnerable al frizz cuando está entre un 80% y un 100% seco . Este es el momento en el que nos decimos que “ya están casi secos” y empezamos a tocarlos o a estrujarlos. Así es como se produce el frizz. Lo mejor es no tocarlos en absoluto mientras se secan, especialmente cuando están casi secos. En lugar de eso, inclina la cabeza hacia abajo y sacude suavemente el cabello sin tocarlo demasiado. Una vez que estén 100% secos, puedes acomodarlos como desees. Evite también acostarse con el cabello húmedo.

6. Corte de pelo incorrecto

Los cortes de cabello que implican entresacar o texturizar el cabello pueden provocar que las hebras dentro de cada grupo de rizos tengan longitudes diferentes. Si se trata de ese tipo de corte, evite "apretarlo" demasiado. En lugar de ello, utiliza la técnica de las “manos de oración” para aplicar los productos, de modo que incluso los mechones más cortos permanezcan en su lugar. (Lee AQUÍ nuestro artículo y descubre todas las técnicas de estilismo).

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7. Tejidos abrasivos

Ten cuidado con los tejidos que tocan tu cabello. Las telas como la lana y la franela tienen una textura abrasiva que puede provocar que el cabello se encrespe al entrar en contacto con él. Duerme sobre seda o satén, tejidos que, por el contrario, tienen una textura “lisa”. En general, también hay que prestar atención al roce con objetos. Ponte la chaqueta o el jersey de cuello alto con cuidado, lleva los bolsos y mochilas sin aplastarte el pelo y, cuando puedas, evita los gorros, sobre todo los de invierno.